El domingo, 22 de agosto, viajé con el pastor Mateo Quispe a la zona rural de La Paz para visitar una iglesia de la ciudad de Coana.
El pastor local llevó a cabo un servicio bautismal en un río cercano que proviene directamente de la cordillera de los Andes. Luego de leer unas escrituras y citas del Hermano Branham, llamó a los candidatos (no sabían cuál era el número exacto, pues pensaban que serían máximo cinco o siete). Para su sorpresa, acudieron ocho hermanos y ocho hermanas. Descendieron al agua para rendir su vida al Señor.
La Presencia del Señor se sintió tan real que las hermanas en particular no pudieron retener las lágrimas cuando entraron en el agua. Estaban tan emocionados y gozosos de cumplir con esta parte de la Palabra. Luego de la ceremonia, los creyentes locales con gran alegría saludaron a sus nuevos hermanos y hermanas. Los hermanos se veían sonrientes, felices de ser miembros de la Novia de Cristo.
Noté que muchos creyentes se conmovieron por la atmósfera que se percibía en el lugar. Sin duda pasamos un maravilloso día de compañerismo con estos hermanos, que siguen arrojando la red del Evangelio en las zonas rurales, a fin de añadir nuevas semillas de Dios a Su granero.
La mayoría de los nuevos creyentes se enteraron del Mensaje por un programa radial cuando estaban en distintas denominaciones. El pastor local transmite todos los domingos por la mañana un programa de treinta minutos, donde suele leer sermones completos del Hermano Branham. Al final, el pastor indica la dirección y el contacto telefónico de la oficina de VGR, junto con los sitios web donde pueden recibir más información y literatura.
La mayoría de los miembros de la iglesia denominacional escuchan la transmisión los domingos por la mañana. El pastor Quispe permanece muy ocupado con las muchas llamadas que recibe de parte de personas que quieren saber más del Mensaje de Malaquías 4:5. El programa lo escuchan hasta en la frontera de Chile con Perú. Está confirmado que es un medio muy exitoso de difundir el Evangelio de Jesucristo en esta región.
Durante 27 años el pastor Mateo ha sido buen amigo del Hermano Tarqui y la iglesia lo aprecia mucho. A los creyentes de la zona les gusta mucho invitarlo a las distintas actividades que organizan. Es una iglesia autónoma que no pertenece a alguna asociación de iglesias y no está influenciada por otros ministros o iglesias.
El pastor Mateo, en abril del 2016 bautizó a veinte creyentes, en octubre a siete creyentes y en agosto del 2017 a dieciséis hermanos.