A solo dos horas de Lima en dirección norte, se despliega una ciudad donde se funden el océano, el desierto y un hermoso valle. Este lugar, también conocido como la Capital de la Agricultura, es la ciudad de Huaral.
Mucha gente de la capital acude a este valle fértil para descansar de su trabajo; pero no tienen idea de que a unos metros de la Plaza Mayor hay un lugar donde pueden hallar descanso para su alma.
Se trata del Tabernáculo la Voz de Restauración del Lirio del Valle, donde tuve el privilegio de visitar, como distribuidor de Grabaciones la Voz de Dios de Perú, a nuestros queridos hermanos y hermanas en Cristo Jesús.
Quizás no sean las personas más ricas en cuanto a posesiones mundanas o las más distinguidas según los estándares del mundo, pero ciertamente son ricos en humildad y llevan una vida simple dedicada al Señor.
El Cristiano no tiene una sola preocupación en el mundo. Deben ser las personas más libres y más felices de todo el mundo. Pues no hay nada… Uds. no pueden perder. Y todas las cosas les ayudan a bien a los que aman a Dios. Entonces, ¿cómo podemos perder? Sencillamente no hay nada que perder, ¿verdad? Estamos anclados confiadamente en Jesucristo, rumbo a la gloria, pasando un buen momento en nuestro camino, con Dios proveyéndonos todo. Maravilloso.
El ángel del pacto (54-0301)
Nos alegró mucho relatarles a todos los creyentes las buenas nuevas concernientes a la obra que desempeñamos alrededor del mundo y las bendiciones maravillosas que el Señor nos tiene reservadas.
Sin duda, la explicación del proyecto de la Tableta Agapao fue lo más relevante y la culminación del hermoso servicio que disfrutamos con los santos.
Qué escena tan especial fue ver a los creyentes interactuando con la tableta de muestra y dándose apenas una idea. Prometieron orar y esperar el momento en que el Señor provea el envío de esta bendición a todos los que viven en Perú.
Todos los creyentes unieron su voz en adoración a Dios para expresar su gratitud por todo lo que les está concediendo. Les mandan muchos saludos al Hermano Joseph y al personal de VGR de Jeffersonville, por materializar este proyecto. Ciertamente significará una gran bendición para los creyentes de Huaral y de las demás ciudades peruanas.
El Hermano Sherman Napuri
Oficina de VGR de Perú