11/11/2016
Él provee

6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.

Hebreos 11:6

Recibimos este testimonio de parte de un hermano que confió en que el Señor supliera las necesidades de su familia. Cuando todo empeoraba y parecía que no había esperanza, entonces llegó Jesús.

A finales de agosto del 2016, el negocio estaba completamente paralizado. Pasé todo el día sin conseguir trabajo para mantener a mi familia. Esa noche no tenía nada que darles de cenar a mis hijos.

Cuando ya casi marcaban las 6:00 p. m., le dije esto a Dios: “Señor, Tú sabes qué comerán hoy mis hijos, pues ya no puedo hacer nada más”. Confié en que el Señor proveyera lo que necesitábamos, a pesar de que ya había anochecido.

Entonces Dios intervino. Al cabo de unos minutos, llegó una cliente para ofrecerme un trabajo. Me pagó una gran cuota inicial por el trabajo que solicitó y unos saldos pendientes.

Nuestro Señor siempre suple y conoce nuestras necesidades. Gloria a Dios, pues esa noche ni mi familia ni yo nos acostamos hambrientos. 

Que nuestro Señor Jesucristo los bendiga y que siempre hallen gracia delante de Él.

Kenia

No importa cuán graves se vean las circunstancias, contamos con las promesas de Dios, que son mucho más reales que cualquier prueba o tribulación que enfrentemos. Nuestro Señor Jesús cumple Sus promesas si tan solo Le creemos.

31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?

32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.

Mateo 6:31-34