10/12/2018
Oyendo por primera vez

Nuestra obra en la República Democrática del Congo empezó a cobrar fuerza cuando en 1986 el Hermano Joseph visitó la ciudad capital de Kinsasa por primera vez. En los últimos treinta dos años, la obra ha prosperado a partir de solo un puñado de centros de distribución y aproximadamente 10.000 creyentes hasta llegar a 100 centros de distribución, más de 15.000 iglesias, cientos de centros de distribución secundarios y casi 1 millón y medio de creyentes.

Los muchachos de las cintas aún son un componente vital de la gran máquina de Dios, no solo en África central, sino mundialmente, pues están cumpliendo con su labor de alcanzar por medio del Evangelio de Jesucristo a todos los que el Padre ha dado. Estos hermanos permanecen enfocados en un objetivo: presentar el Mensaje a la gente a toda costa.

Los siguientes videos nos fueron enviados por un equipo de muchachos de las cintas de Kinsasa que viajó 300 kilómetros hacia una aldea llamada Masamuna (partieron a las 6:00 p. m. y llegaron a las 5:00 a. m.). Allí se encontraron con un pastor de una aldea que no aparece casi en ningún mapa, conocida como Dunda (a 33 kilómetros y dos horas en motocicleta).

¿Por qué pasarían tantas dificultades solo por ese punto diminuto en el mapa? Porque en esta aldea de unas cien personas les esperaban miembros de la Novia de Dios que anhelaban oír la voz de Su profeta por PRIMERA VEZ en sus vidas.

Esta es la morada del pastor de la aldea de Dunda, quien aceptó el Mensaje y, por primera vez en sus vidas, están escuchando la voz del Hermano Branham.

Después de visitar Masamuna, un conocido llevó al equipo a una aldea remota llamada Mbamba para llevar a cabo un servicio con los lugareños. En el video habla el Hermano Branham, luego se traduce al francés, después al idioma de la tribu (el dialecto kingongo).

El equipo de muchachos de las cintas dedicó casi una semana a presentar la Voz de Dios a esta generación. Unas familias querían hacer servicios de cinta en sus casas.

Varios ministros, caravanas y viajeros habían pasado por la aldea en los últimos años, pero esta era la primera vez recibían al Hermano Branham en las cintas.