21/11/2017
Un preciado hermano

Con profundo pesar en nuestro corazón informamos la partida del Hermano Marius Rudat, nuestro querido asistente de la oficina de Namibia.

Esto fue escrito por el Hermano Keith Herne, administrador de la oficina de Sudáfrica:

El Hermano Marius empezó a trabajar en la biblioteca de la Voz de Dios de Windhoek en enero del 2001, cuando los hermanos Innocent y Mouton administraban la oficina. Aunque no tenía educación, amaba este Mensaje y tenía un gran fervor por las almas. En varias ocasiones, lo acompañé a visitar hospitales de Windhoek para compartirles el Mensaje a los pacientes y orar por ellos. Iba en horario de visitas, así que los visitantes también lo escuchaban.

El Hermano Marius se encargaba de que todos los presentes en la sala prestaran atención a lo que testificaba del Hermano Branham y cerraran los ojos mientras oraba por ellos. Se aseguraba de que se marcharan con un libro o un tratado.

El Hermano Marius causó tan buena impresión que las monjas del hospital católico esperaban con ansias su visita y le daban carta blanca para compartir el Mensaje a los pacientes. Su amor por las almas era contagioso e incuestionable.

Él instalaba un pequeño estand del Mensaje en el mercado, donde exhibía y distribuía los libros y tratados del Hermano Branham. Abordaba a los transeúntes, los invitaba a acercarse y les presentaba el Mensaje. Su enfoque era único: los abordaba y les decía que no dieran otro paso hasta permitirle hablar del profeta que Dios envió. Los que frecuentaban su estand sencillamente amaban al Hermano Marius. Estoy seguro de que lo extrañarán profundamente en Namibia, pero dejó un testimonio de que amaba al Señor y el Mensaje.

El Hermano Marius murió de un ataque al corazón, con cuarenta y cuatro años.

El Hermano Keith