Cuando me enteré en mayo del 2014 que el Hermano Joseph había aprobado los eventos del Tiempo a Solas en Nigeria, personalmente, me alegre mucho, pues sabía que esto provocaría gran entusiasmo en los jóvenes de Nigeria.
Desde entonces, hemos llevado a cabo estos eventos varias veces hasta que los suspendimos debido al proyecto de la construcción de nuestra propia oficina de trabajo. En octubre del 2017, cuando nos mudamos a las nuevas instalaciones de nuestra oficina de trabajo, reanudamos los eventos. Fue muy emocionante y significó la respuesta a las oraciones de los jóvenes. En cada reunión siempre se hace la pregunta: “¿Cuándo nos reuniremos de nuevo?”.
Poco después, los jóvenes de las afueras de Lagos y de las ciudades vecinas comenzaron a pedir que se llevara a cabo el programa en otras ciudades para que pudieran tener la oportunidad de disfrutar de esta bendición. Los pastores no se quedaron atrás y también hicieron la misma petición para que los jóvenes se beneficiaran del programa.
Como respuesta a sus peticiones, el Hermano Joseph aprobó que se llevara a cabo el evento del Tiempo a Solas en otras ciudades alrededor del país. El primero tendría lugar en Ciudad de Benín, el 20 de octubre del 2018.
Con gran entusiasmo, enviamos la información y las invitaciones del programa. Poco después, empezamos a recibir respuestas de pastores, las cuales no cesaron hasta el día del evento.
Finalmente llegó el día y los jóvenes empezaron a reunirse en el lugar del evento. Algunos viajaron cuatro horas desde otras ciudades. Era evidente la emoción en sus rostros mientras entraban con grandes expectativas; algunos ni siquiera sabían de qué se trataba el Tiempo a Solas.
Más de 330 jóvenes asistieron al evento. Después me contaron que un joven viajó desde el norte de Nigeria para asistir al Tiempo a Solas. El viaje tardó diez horas. Esto demuestra que los jóvenes anhelan asistir a este evento.
Después del preámbulo necesario, todos se retiraron a sus lugares para dedicarse individualmente a su Tiempo a Solas. Durante el lapso de una hora, un silencio total inundó el lugar. Verdaderamente fue un Tiempo a Solas, guardando silencio ante el Señor. Unos leyeron el libro que teníamos disponible, El raro, algunos oraron y otros leyeron sus Biblias. Sin duda todos se concentraron en la actividad.
Cuando se acabó la hora de estar a solas con el Señor, regresamos al salón. No pudimos disfrutar de los juegos por las limitaciones de las instalaciones; no obstante, respondimos unos cuestionarios del sitio web de Young Foundations. Fue muy interesante.
Terminamos el evento con un refrigerio que el Hermano Joseph les proveyó a los jóvenes que asistieron. Aún seguían emocionados mientras comían y confraternizaban entre ellos.
Se preguntaban: “¿Cuándo nos reuniremos de nuevo?”.
Los resultados excedieron nuestras expectativas. Los padres de los jóvenes y sus pastores aprecian esta gran bendición y ciertamente quieren más reuniones como esta.
El Hermano Andrew Alasa
VGR de Nigeria