Estamos en la temporada de carnaval en Brasil. Durante esta época, muchos andan en fiestas mundanas y en la playa, mientras satisfacen sus placeres carnales. Sin embargo, para la Novia de Cristo es completamente diferente.
Cada año, los creyentes de Tijucas do Sul, junto con la iglesia de Curitiba, organizan un día especial para el Tiempo a Solas. En está ocasión, el tema fue “A Él oíd” y asistieron casi cien hermanos. Se requirieron muchos preparativos y muchas personas y familias ayudaron.
El día comenzó muy temprano, pues los hermanos llegaron en la mañana para dedicarse al Tiempo a solas junto con la Novia de alrededor del mundo. Todos se dispersaron por la zona verde, el patio, el parqueadero y las casas con un interés común: estar a solas con Dios y escucharlo.
El tiempo se pasó tan rápido que muchos se tardaron un poco más que la hora habitual de meditación.
Inmediatamente después, los creyentes compartieron su experiencia sobre las pepitas de oro que encontraron durante su tiempo con el Señor. Cantamos unos himnos y luego disfrutamos de un delicioso almuerzo.
La tarde fue perfecta para conocer a los demás mientras nos distraíamos con diferentes juegos divertidos y confraternizábamos. Este año, asistieron muchos jóvenes nuevos al evento. Estaban muy alegres y lo pasaron de maravilla.
Al caer la noche, llegó la hora del servicio. El Hermano Branham predicó el mensaje La vía de Dios dispuesta para nosotros (52-0900). Él estaba tan agradecido porque el Hermano Billy Paul había recibido el Espíritu Santo y nos enseñó que debíamos ser como los jóvenes hebreos.
Todos se regocijaron y, al sonar En la presencia de Jehová, la gente se dirigió al altar para orar y Él estuvo presente para satisfacer las necesidades de Su pueblo. Aunque el servicio ya había terminado, algunos permanecieron en la capilla alabando al Señor, en la dulzura del Espíritu. Se percibía una atmósfera sobrenatural rebosante de AMOR.
La cena incluía varias opciones para satisfacer diferentes gustos. En la noche, algunos jóvenes jugaron voleibol y las familias se reunieron alrededor de la fogata mientras se tocaban canciones evangélicas con una guitarra acústica.
¡Fue un sábado muy especial! Sin duda la atmósfera continuó en el servicio dominical y los niños cantaron algunos himnos que nuestro profeta solía cantar.
¡Es tan gratificante ver que nos estamos preparando mediante ESA VOZ!
¡Dios los bendiga a todos!
El Hermano Vini
Brasil