Confiamos en que estas Pepitas de Oro alegren su día y fortalezcan su postura por la Palabra.
Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.
Un poco antes de este capítulo, hallamos una parte en la que el Hijo de Dios pasó mucho tiempo en oración. Y si Jesús tuvo que pasar tanto tiempo en oración para permanecer en compañerismo con el Espíritu que moraba en Él, ¿cuánto más tiempo debemos Ud. y yo invertir en oración? Mucho tiempo en oración. Si tan solo supieran lo que significa el tiempo en oración. Lo que… A veces, cuando Ud. está orando, Dios cambia el—el destino completo de distintas cosas que van a suceder. ¿Creen eso? Quizás algo está a punto de suceder y su oración podría cambiar la situación por completo.
La sanidad de la hija de Jairo (55-0227E)
Y he aquí dos varones que hablaban con él, los cuales eran Moisés y Elías; quienes aparecieron rodeados de gloria, y hablaban de su partida, que iba Jesús a cumplir en Jerusalén.
¿Ven? Dios nos ama a todos por igual. No estamos uno por encima de otro. Todos somos iguales. Somos hijos.
Tengo dos niñas y un niño. No hago la más mínima distinción entre ellos; todos son iguales. Así lo hace Dios. Si Ud. es una ama de casa, o si es un predicador, o un diácono, o lo que sea, a la vista de Dios todos somos iguales. Solo somos hijos. Cada uno debe encargarse de un oficio y hagámoslo con todo nuestro corazón.
Quisiéramos ver a Jesús (54-1205)
Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Os digo que éste descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido.
Y si Ud. no va a ser honesto con su hermano, jamás será honesto con Dios. Es un hecho. ¿Ven? Tienen que ser honestos los unos con los otros. Y entonces haga eso y—y será honesto con Dios: trate a su hermano tal como quiere tratarlo a Él.
La vid verdadera y una vid falsa (55-0607)
Lo que Dios nos ha ordenado hacer, si Ud. se queda exactamente en su llamamiento y allí persiste, Dios lo usará. Si trata de adelantarse y hacer algo más, terminará fracasado en alguna parte. Siempre es así. Y, sin embargo, la raza humana es así; uno la ve haciendo eso.
Las aguas de separación (55-0606)
¡Oh!, ¿no están contentos? Pues deberíamos ser las personas más alegres del mundo, por cuanto somos Cristianos, viviendo en este día, amigo. No busque algo más grandioso. Ud. no puede tener nada más grandioso que el Espíritu Santo. Lo tiene ahora mismo. Sencillamente amelo y aférrese de Él. Y—y permita—permita que lo controle y lo ayude. Ahora, todos, desaten el poco de fe que tengan esta noche. Permitan que Dios obre Su voluntad en Uds. Y Dios lo concederá.
Venid, oíd todos los que teméis a Dios, Y contaré lo que ha hecho a mi alma.
Dios tenía confianza en Job porque Él tenía compañerismo con Job. ¡Oh, Dios! ¡Que el Tabernáculo Branham vea eso hoy! La única forma de que Dios pueda tener confianza en Ud. no es porque Ud. haga algo, o con su fe haga algo, ¡sino cuando tiene compañerismo! Amén. ¡Compañerismo!
Compañerismo por redención (55-0403)
Dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en si mismo, de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra. En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad, a fin de que seamos para alabanza de su gloria, nosotros los que primeramente esperábamos en Cristo.
Entonces yo… Confíe en el Señor. Amén. No importa qué sea, todo obra para bien. Ud. no puede perder cuando se convierte en un Cristiano; sencillamente no puede perder. Confíe en Él nada más y en cualquier rumbo en que vaya, solo mantenga sus velas orientadas a Su Espíritu. Él lo guiará al puerto. Todo saldrá bien.
Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; mas aquel a quien se le perdona poco, poco ama.
Sin importar cuáles sean sus preocupaciones, cuáles sean sus tentaciones, permanezca en la Palabra de Dios.
Redención por juicio (54-1114)