Branham y Baxter en Chicago
Entre el 7 y el 10 de agosto, los hermanos William Branham y J. Ern Baxter visitaron la iglesia Filadelfia, ubicada en Chicago, Illinois.
La convención solo tardó un fin de semana, pero produjo resultados tan maravillosos que no se puede evitar alabar a Dios por estos queridos hermanos.
Llevamos mucho tiempo tratando de traer a los hermanos a Chicago con motivo de una gran campaña. Sin embargo, aun no ha pasado, pero pronto se logrará.
A pesar del clima sumamente caluroso de Chicago y de la poca publicidad de las reuniones, una multitud desbordante llenó la iglesia de Filadelfia la primera noche. Así permaneció durante toda la convención y era imposible conseguir un asiento en la amplia iglesia, incluso si se llegaba con hora de anticipación. Las noticias de las reuniones se difundieron como un incendio forestal y se recibieron llamadas telefónicas de todo nuestro gran continente.
Los hermanos vinieron sin alardear. Representan el espíritu que necesita afianzarse en América. Ellos hicieron los anuncios necesarios en las reuniones; nunca mencionaron nada sobre el dinero para hacer que la gente se sintiera presionada a ofrendar. Simplemente son dos hombres que confían en que el Señor proveerá y los ayudará en todo sentido.
El don del Hermano Branham se ha desarrollado a tal grado que uno se maravilla. Su discernimiento es perfecto hasta en los menores detalles. Sucedió que yo conocía muchos de los casos y las personas por las que oró el Hermano Branham en Chicago, y no encontré un solo diagnostico erróneo.
El don profético y el don de sabiduría que posee el Hermano Branham es tan divino y tan poco influenciado por el portador mismo que uno debería llorar en agradecimiento a Dios. Muchas personas experimentan liberación sobresaliente y se pronunciaron muchos testimonios maravillosos en esta reunión breve. Familias completas experimentaron el poder liberador de Dios gozando salud y victoria.