Este es el informe sobre nuestro Tiempo a Solas del 6 de mayo del 2017:
El viernes pronosticaron un tiempo muy adverso para el fin de semana. El sábado el riesgo de lluvia era del 80 %. En sitios web de personas que organizan actividades al aire libre, verifiqué que todos se quedarían en casa, especialmente el sábado, pues llovería con toda seguridad. El viernes por la noche la lluvia confirmó todos los pronósticos meteorológicos; sin embargo, el Hermano Branham nos enseñó que la oración cambia la situación.
Oramos pidiéndole al Señor que impidiera que la lluvia estorbara nuestros planes, pues vendrían dos caravanas grandes de muy lejos para pasar el día con nosotros y no queríamos que quedaran decepcionados.
El Señor fue maravilloso. A las 6:20 a. m., cuando partí de casa a la oficina, vi al sol deseoso de desplegar su color, con mucha timidez tras las nubes. Una tenue briza se esparció por la región y todas las nubes que le impedían el paso desaparecieron, por lo que brilló vivamente en pleno otoño brasileño.
El día fue precioso: el cielo azul nos mostró que el Señor había escuchado nuestras oraciones.
Los jóvenes comenzaron a llegar, se ubicaron para meditar y el silencio reinó en el entorno. Nuestra asistencia fue de 65 jóvenes.
Un jovencito llamado Gabriel me comentó lo siguiente: “Hermano Anderson, a dondequiera que vamos, el tiempo siempre se pasa tan rápido; cuando estamos aquí en la oficina, el tiempo parece detenerse”.
Gozamos un día muy especial y en todo vimos la mano de Dios en acción.
Su hermano en Cristo, Anderson Vieira
Oficina de Brasil