08/10/2019
Un llamado a la puerta: comentarios

La historia de Imraan conmovió a miles de creyentes alrededor del mundo. Los siguientes son algunos de los comentarios que recibimos del artículo original. Noten que en muchos de los comentarios mencionan que orarán por nuestro nuevo hermano y también oran para que pueda guiar a otros al Señor. Esperamos que disfruten los comentarios de los santos. Estamos ansiosos por publicar en los próximos días la conclusión del testimonio del Hermano Imraan.

Vaya, qué testimonio tan conmovedor. Que Dios le de fuerzas al hermano Imraan.


¡Hay Poder en el Nombre de Jesús! ¡Dios llevó a esta preciosa alma a la puerta de un almacén del Mensaje de Su profeta, el Hermano Branham! ¡Qué testimonio tan sobresaliente! Que nuestra oración y nuestra carga sean como las del Hermano Keith: ¡presentarle almas a Él!


¡Oh! La sabiduría que Dios le dio al Hermano Keith en sus palabras. He aprendido a hablar dulcemente a los que escuchan el Mensaje por primera vez. ¡Qué sabios los ejemplos prácticos que le dio a este hombre! Vaya, su oración recibió respuesta y ¡él tuvo que lidiar con todo lo que esto conllevó! Hizo con paciencia un trabajo Cristiano excelente y humilde, al recibir una y otra vez al Hermano Imraan cuando enfrentaba pruebas y problemas por ser Cristiano. Me conmovió mucho la respuesta que le dio a este hombre, con respecto a ¡por qué no podía morir en el momento que quería! ¡Cómo le mostró el propósito de vivir para que otros como él encuentren salvación! Dios lo bendiga, Hermano Keith, por esta maravilla para el Reino y una oración sabia y generosa. 


Vaya, aprecio mucho este testimonio. Hace que la prueba que estoy viviendo parezca insignificante. Gracias por compartirlo.


Amén. Oh, qué tiempo. No puedo dejar de pensar en esta historia que contó el Hermano Branham. Un testimonio maravilloso del Dios viviente.

“Una vez cuando César, después de una gran batalla, dijo: ‘Quiero que mi guerrero más destacado vaya a mi lado en esta gran celebración de triunfo sobre nuestro enemigo’. Y todos los oficiales prepararon sus plumajes y lustraron sus escudos, y desfilaron, Uds. saben, de esa manera, así como—como verdaderos soldados. Después de un rato, un hombrecito pasó caminando, herido. ¡Oh! Él apenas dio una mirada hacia arriba, y continuó así. César dijo: ‘Un momento. Un momento. Tú’, ni siquiera estaba vestido como—como un oficial, le dijo, ‘ven acá’. Le preguntó: ‘¿Dónde obtuviste esas cicatrices?’. Él le respondió: ‘Allá en el campo de batalla’. Le dijo: ‘Sube acá. Tú eres el hombre que yo quiero que esté a mi lado’. ¿Por qué? Él demostró que había estado en batalla. ¡Oh, Dios!, ten misericordia del hombre que se corte la mano con una lata de sardinas y que luego sea condecorado. Yo quiero tener cicatrices de batalla. Como dijo Pablo: ‘Llevo en mi cuerpo las marcas de Jesucristo’. Por eso es que yo quiero batallar en el campo de batalla”. - La más grande batalla jamás peleada (62-0311)


Este es un testimonio glorioso. ¡Tan maravillosa gracia! Estoy muy feliz por el Hermano Imraan, por el Hermano Keith y el otro hermano que oró para que el Señor le enviara otra alma. ¡Cuán grande eres Dios!


¡Tal como dijo el Hermano Branham!

“Cuando una vez estuve en Su Presencia y me di cuenta de que había Alguien que amaba lo que no se podía amar, que hubo Alguien que me amó cuando nadie más lo hizo, que hubo Alguien que me cuidó cuando nadie más lo hizo. Yo abracé Su cruz, me aferré a ella y Él y yo nos convertimos en uno. Desde entonces lo he amado. El manchó mi seno y mi corazón con Su Sangre al tocarme y perdonar mis pecados. Y en esta noche estoy contento de ser uno de los Suyos. Nunca he deseado abandonar este lugar Celestial, a pesar de que con frecuencia el tentador ha tratado de persuadirme, pero estoy seguro en el pabellón de Dios y estoy feliz en Su amor y Su Gracia; vivo en el lado de los aleluyas. ¡Vaya! Hace que mi corazón se regocije”. - 62-0909E En Su Presencia


¡Gloria a Dios! ¡Un alma vale más que diez millones de mundos! ¡Aleluya! Me alegra mucho que seamos parte de la gran Máquina de Dios, ¡hasta trabajando en armonía con la persona que le regaló una Biblia de Gedeón! ¡Todas las cosas les ayudan a bien a los que Lo aman!


Gracias, amado Señor Jesús. ¡Qué maravilloso testimonio y respuesta a la oración! El Señor es tan maravilloso al colocar ese deseo en el corazón del Hermano Keith y enviar al hermano al lugar correcto, ¡donde estaban las respuestas adecuadas y la dirección hacia Él! ¡Sus caminos son muy preciosos y poderosos! ¡Gloria a Su poderoso Nombre y gracias a Él por permitirles a todos compartir! 


Dios lo bendiga, Hermano Keith, por compartir este maravilloso testimonio de cómo Dios contestó una oración sincera. Estoy orando por Imraan mientras Dios sigue revelándose ante él y lo guía hacia la luz de Su verdad. Dios obra Sus maravillas en maneras misteriosas. ¡Él sigue llevando hombres y mujeres a Su Palabra! ¡Gloria a Dios!


¡Qué hermoso testimonio! Solo con ver la forma en que Él obra, sabemos que es Él. Muchas gracias por compartir este testimonio gratificante. Confío en que Dios protegerá a este hermano hasta que reciba su recompensa. Dios los bendiga.


Siento la misma fuerza de este joven en mi interior a medida que leo este testimonio. Todos luchamos con esta carne, ¿no es así? Estoy sumamente agradecido con Dios por darle un alma que pudiera guiar hacia nuestro Señor Jesucristo. Qué maravilloso. Oraré por Imraan. Estoy agradecido porque él no está huyendo y, sobre todo, ¡porque Dios lo guio a llamar a su puerta! ¡Gloria al Señor!


Algunos a través del agua, unos por diluvio, otros por fuego, pero todos por medio de Su Sangre. ¡Dios bendiga a todos los santos!


¡Aleluya! ¡Gloria a Dios! ¡Dios lo bendiga, Hermano Keith por su hambre por las almas perdidas! ¡Que yo pueda recibir inspiración del Espíritu Santo para encontrar diariamente a alguien a quien testificar y guiar al Señor Jesús!


¡Este testimonio hizo arder mi corazón!


Amén. Él aún llama a sus aguiluchos desde lo lejos, vendrán del este y el oeste al banquete y cenarán con el Señor. Su Nombre es fiel y el Dios que lo llamó y lo salvó es capaz de protegerlo y proporcionarle un refugio, pues Él es nuestra Roca en tierras calurosas, un refugio en la tormenta. Amén.


Si todos los que han sido salvos ganaran a otro. Y todos los que sean ganados ganaran a otro. ¡Qué ejército se ganaría si todos los que han sido ganados ganaran a otro!


¡Oh, gloria! Gracias, Jesús. Este testimonio me conmovió el corazón y el alma, y me llenó los ojos de lágrimas. Señor, ayúdame a cumplir Tu voluntad perfecta para mi vida.


Este testimonio me impactó demasiado, agradezco al Señor porque Imraan encontró al Señor que buscaba. Este testimonio me recuerda cómo se encendió mi vela.


Vaya, aleluya a nuestro Gran Rey, Jehová de los ejércitos, nuestro Salvador, oh, ¡el Señor Jesucristo! ¡Gloria a Tu Nombre! ¡Vaya! Mi corazón rebosa de alegría por este testimonio. ¡Oh, vaya! ¡Siento un gran gozo que no puedo explicar! ¡Gracias, Señor Jesucristo! Este hermano no debe preocuparse, Dios lo guardará; él sabe que Satanás es un fanfarrón. Dios los bendiga a todos. Los amo mucho a todos.


¡Qué testimonio! Me hizo llorar y arrodillarme para agradecerle al Señor por Su gracia. Que el Señor Jesucristo fortalezca a Imraan con su nueva fe. Dios lo bendiga, Hermano Keith.


¡Qué Dios tan maravilloso el que servimos! Él siempre está dispuesto a ayudar a Su simiente.


Que Dios bendiga a ese hermano. Me recuerda la ocasión en que mi familia me rechazó cuando conocí este maravilloso Mensaje en el 2002, gracias a un hermano. Mi familia, que era católica, me dijo que si no regresaba a su denominación no podría tener comunión con ellos. Les dije que no podía rechazar el Mensaje confirmado, pues ¡habían visto el poder de Jesucristo obrando por medio de mí cuando creí! Unos meses después presenciaron las bendiciones de Dios en mí y ¡me dejaron adorar a mi Salvador libremente! Sigo sirviéndole y Él me llamó para predicar este gran Mensaje y ser un diácono en mi iglesia local de Kigali, Ruanda. Que Él bendiga a toda Su Novia. Amén.


Esto fue una gran bendición para mí. Estoy leyendo esto mientras desayuno y casi derramo lágrimas en mi café. Me encanta la forma en que Dios sació su carga por un alma. También estoy orando al respecto, pero siento que no tengo el poder para ser un testigo. Esto me conmovió. Estaré orando por Imraan. Tengo un buen presentimiento sobre él.


¡Qué testimonio! Me alegro tanto por Imraan que dije una oración por él. Gracias, Hermano Keith. Este testimonio me fue de bendición. Dios lo bendiga.


También he estado orando para que Dios me ayude a traerle almas. ¡¡Qué testimonio tan asombroso y alentador!! Por favor, oren para que Dios responda mis oraciones, para el beneficio de las demás almas y para Su gloria y alabanza.


Amén, este testimonio es asombroso, me alentó a seguir testificando sobre el Mensaje de la hora. Indudablemente el Señor Jesús sigue llamando.


Mmm… esa es sí es fe y Dios se encargará de consumar la obra por causa de Su nombre que él aceptó. Que Dios lo bendiga.


Sin duda Dios trajo a Imraan en el tiempo designado y Él es más que capaz de guardarlo. Nuestro Dios es el mejor. Dios te bendiga, Hermano Keith.


Que el Señor bendiga ricamente a Imraan y al Hermano Keith. Esto fue muy motivador para todos nosotros. Exactamente así es cómo conocemos al Hermano Keith, siempre permanece en los negocios del Señor y del Hermano Branham con verdadera humildad y sinceridad. Todo el tiempo está dispuesto a ofrecer ayuda y colaborar en donde sea. Gracias, VGR.


Gracias, Jesús. Esto me alegró el día. Que Su mano repose sobre este joven.


Amén. Estoy muy feliz de leer este testimonio. Efectivamente debemos enfocar a la gente en Cristo, dirigirlos a Él y Él se encargará del resto.


Vaya, ¡qué testimonio!, Dios aún llama a sus elegidos. Me emocioné tanto. Gracias por este sitio, nos ayuda a los creyentes a persistir y saber que servimos a un Dios viviente. Oh, ¡cuánto Lo amo a Él!


¡Gloria a nuestro Señor Jesucristo! ¡Vaya, qué testimonio! Estoy muy entusiasmado por la salvación de Imraan. Me siento muy bien. El milagro más grande que conozco es que alguien crea en nuestro Señor Jesucristo. Que nuestro Señor le conceda su salvación. ¡Amén!