Cuando Uds. nacieron en este mundo, antes de que siquiera comenzara el mundo, Dios los conocía, los colocó posicionalmente. Si eso no es verdad, entonces la Biblia tampoco. Exacto. Dios puso nuestros nombres en Libro de la Vida del Cordero; no cuando Uds. pasaron al altar, sino antes de la fundación del mundo.

Porque Ud. es un gene de su padre, y Ud. estaba en su padre, sin embargo su padre no tenía compañerismo con Ud. porque él…Ud. estaba allí adentro, pero Ud. no lo sabía y él no lo sabía, pero Ud. fue manifestado para que Ud. pudiera…para que él pudiera tener compañerismo con Ud. Y al nacer de nuevo, Ud. es nacido de Vida Eterna.

Pero cuando uno ha nacido del Espíritu de Dios, entonces uno tiene una...uno es un hijo de Dios, y uno siempre fue un hijo de Dios, y uno siempre será un hijo de Dios. No hay manera de separarlo, porque es...Uds. tienen Vida Eterna. Y lo Eterno nunca comenzó; ni tampoco terminará alguna vez. ¡Oh, por la gracia de Dios!

Ya es la hora. Ya es el tiempo. Es la hora aceptada. Este es el año de aceptación del Señor. Ahora es cuando deben ocurrir las sanidades. Ahora es cuando ocurren los milagros. Hoy Cristo Se está revelando. Lo estamos viviendo; no será en el futuro. El diablo no deja de negarlo; eso es catolicismo. Hoy es el día. Esta es la hora. Este es el tiempo. Este es el lugar, ahora mismo. Este es el día.

Si Dios me amó de tal manera, hasta degradarse para sacarme y levantarme cuando yo era un extraño a Él, eso me da confianza que Él quiere usarme. Él tiene un propósito al haberlo hecho. Él vio algo en mí. Él vio algo en Ud. Él tenía un propósito al haberlo salvado a Ud., mire hoy la gente que no es salva. Mire los millones que Él pudo haber escogido en lugar de Ud., pero Él lo escogió a Ud. ¡Amén! Nadie puede tomar su lugar. ¡Amén! Ud. está en la economía de Dios. Nadie puede hacerlo. Ése es Su Amor para con Ud.

Oh, vaya. Dios está en su pueblo hoy (hoy); Uds. son los hijos de Dios. [Cinta en blanco—Ed.]. Ahora mismo, Uds. son los hijos de Dios. Tienen ese privilegio. Dios está en su pueblo.

Dios no recuerda que Ud. era un pecador. Ud. es un hijo, Ud. es una hija; ya no hay ninguna memoria del pecado. Dios lo arroja al Mar del Olvido, el blanqueador. El Mar del Olvido es la Sangre que Cristo derramó por Ud. Y, por lo tanto, después Ud. y Dios son Padre e hijo, por la gracia de Jesucristo; no por algo que Ud. haya hecho, sino por Su gracia. Uds. son hijos e hijas de Dios, y participantes de Sus bendiciones y de Su poder, y de Su Vida. La Vida de Él está en Ud., pues Ud. es un hijo de Dios.

Eso es lo que Dios hará por sus hijos algún día aquí en la tierra. Él los apartará, Iglesia, si Uds. solamente Le obedecen y permanecen con la Palabra, y la creen. Y Él le concederá a la Iglesia, antes de la venida de Jesucristo… le concederá a la Iglesia… Todos los poderes que Cristo poseía serán de la Iglesia. Todo lo que Dios era, Él lo derramó en Jesús; todo lo que Jesús era, Él lo derrama en la Iglesia. Dios quería que se hiciera Su obra, por lo que se la encomendó a Su Hijo; el Hijo quería la obra consumada, por lo que se la encomendó a la Iglesia. “En aquel día vosotros conoceréis que Yo estoy en Mi Padre, el Padre en Mí, y Yo en vosotros, y vosotros en Mí”. En aquel día, porque el mismo poder de Dios que estaba en Jehová Dios, reposó en Jesucristo. El mismo poder que reposó en Jesucristo está en los Hijos posicionados en el cuerpo de Cristo.

Entonces si Ud. es un hijo de Dios o una hija de Dios, Ud. siempre estaba en Dios. Pero El sabía en qué lecho y tiempo Ud. sería plantado. Así que ahora Ud. es hecho una criatura, un hijo de Dios, un hijo o hija manifestado de Dios, para enfrentar el reto de esta hora para vindicar al Dios verdadero y viviente de esta hora, el Mensaje que está surgiendo en esta hora. ¡Eso es correcto! Así fueron formados allá desde antes de la fundación del mundo.

Ahora, amigos, yo sé que Dios los ama.