Hace poco hubo dos convenciones de creyentes en Zimbabue, en las que hermanos y hermanas tuvieron compañerismo en torno a la Palabra.
Durante el fin de semana anterior al Día de los Héroes (el 10 de agosto) se llevaron a cabo dos convenciones enormes en el país; cada una estaba a 300 kilómetros de Harare y a 300 kilómetros la una de la otra. Una se realizó en la ciudad de Mutare, ubicada en la sierra oriental, y la otra en Mashava, que está a 40 kilómetros de Masvingo.
En ambas reuniones se percibía un espíritu maravilloso de unidad y hermandad entre los hermanos. Ellos querían colocar un puesto de exhibición del material de VGR, donde los creyentes tuvieran a su disposición los libros de la Palabra Hablada del profeta, fotografías, tarjetas microSD, libros de la Palabra Hablada en shona y mucho más.
Logramos instalarlos en ambos lugares y exhibimos una muestra de casi todos los productos que tenemos en nuestra oficina. Los creyentes estaban profundamente agradecidos por los estands de VGR y, sobre todo, se gozaron al recibir los libros gratuitos de la Palabra Hablada en inglés y shona. Teníamos claro —y ya está más que confirmado— que los libros aún desempeñan un papel fundamental a la hora de difundir el Mensaje y alimentar a los creyentes que viven aquí. Vinieron muchos creyentes que viven en zonas rurales o en desarrollo, en las que el suministro de energía es intermitente, o en lugares que carecen completamente de electricidad. Para leer en la oscuridad tienen que utilizar lámparas de gas y de queroseno, velas y demás; algunos tienen casas con sistema de energía solar. Muchas almas se han acercado a Cristo gracias a esos libros. Es asombroso: los creyentes devoraron los libros del estand de VGR y no hay duda de que luego de pasar por allí, ¡van a saltar como becerros de la manada (Malaquías 4:5)!
La obra misionera está alcanzando grandes proporciones en el país, pues hombres dedicados de Dios llevan este Evangelio a las selvas de África. Muchos de ellos visitan la oficina para llevarles los libros gratis de VGR a sus iglesias, sus bibliotecas y sus familias. También los proveímos con CD de MP3 en shona y un reproductor de MP3, por lo cual se mostraron muy agradecidos. Nos llaman por teléfono para contarnos sobre las experiencias maravillosas que han tenido: liberaciones, sanidades y jubileos gastronómicos que ocurrieron mientras Elías les ministraba a sus amigos de África.
En ambas convenciones el Hermano Gordon pudo hablar por un momento. Presentó un informe sobre el trabajo de VGR y aprovechó la oportunidad para colocar una parte de un sermón del Jubileo en shona, Los ungidos en el tiempo del fin. Durante el poco tiempo en que escuchamos el sermón, captamos mucho de la profunda lección que el Hermano Branham dio esa mañana. Fue maravilloso ver la atención de la gente: buscaban las escrituras en sus Biblias y tomaban apuntes a petición del profeta a medida que nos enseñaba. Verdaderamente recibimos una gran bendición que nos dejó con hambre por más. Nos enteramos de que unos hermanos que se sentaron en la parte de atrás mientras nos gozábamos con el aperitivo de la reunión se sintieron guiados a colocar ese mismo mensaje en el bus que los llevó a casa y ¡recibieron la bendición completa! ¡Mis ovejas oyen Mi Voz!
Gracias por proveernos este material. Es imposible saber el efecto que tienen los libros, los CD o las microSD del Mensaje cuando llegan a las manos de la simiente predestinada y la Luz ilumina ese germen de vida. Lo que nos han contado no es más que la punta del enorme iceberg del cumplimiento de la profecía.
Trabajaremos hasta que Jesús venga.
Oficina de VGR de Zimbabue