Oh, esto fue tan oportuno; si su sitio web no fuera mi página de inicio no lo hubiera visto. Me iba a encargar de un asunto en otro sitio web, pero alcancé a ver esto. Seguramente Dios ordenó cuál título sobresaldría en ese momento, pues me llamó la atención y tuve que leerlo. ¡Oro para que el Señor me ayude!
También he estado atravesando dificultades con mi vida de oración y todo se debe a mis hábitos pecaminosos y negligentes. Esta cita me ha ayudado a superar la semana. Confío en que mi vida de oración vuelva a ser como antes.
Vaya, gracias. Estoy enfrentando el mismo problema. He triunfado en mi trabajo, en mis certificaciones y en mis negocios y tengo una esposa maravillosa… Todo lo que quiero lo tengo. Y veo la Mano de Dios en varios aspectos, pero aún no siento gozo. Para empezar, no lo merezco, y además relego mi vida de oración al segundo lugar. No logro ser feliz y extraño cuando podía sentir Su Presencia en mi habitación.